Seguimos avanzando en nuestro verano de película.
Hoy pisteamos el devenir de los zapatos, de los más peques. Y los encontramos en la huerta, plantando calabacines, preparando los tiestos con los alcornoques (belloteros para alguna agricultora) y haciendo unos deliciosos polos de limón.
Y como podéis ver, nos ayudamos unos a otros en todas las tareas y trabajar la tierra no implica perder el look modernillo.
Y tras la merienda hicieron proezas propias de los especialistas del cine. Y es que están super fuertes. Eso si, reconocer cual era luego su calzoncillo y su pantalón fue asunto más complejo.
Los mayores, en el espacio de alu-cine, hicieron sonidos con objetos cotidianos: el viento con el tubo corrugado, la lluvia con arroz y unas tazas metálicas, el fuego con un papel celofán, la tormenta con una plancha metálica, los trinos de los pájaros con un tapón de corcho y una botella (ambos mojados), el cabalgar de los caballos con vasos de plástico, ...Estuvo muy entretenido.
Y con paciencia fuimos capaces de volar.
Enhorabuena por el video de volando! Que chulada! Yo tambien quiero vooolaaaar!!!
ResponderEliminarPor cierto, soy la Mama de Ana y Maxi, dos artistas que se lo estan pasando de cine.
ResponderEliminarHa sido de alu-cine poder "volar" y hacer efectos especiales. Me lo estoy pasando ¡genial! ;-)
ResponderEliminarMiguel Ian
¡Que divertido! ¿¿Cuando vais a hacer una escuela de verano para adultos?? Yo también quierooooooooooooooooooooooo!!!
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