Loky y los gigantes nórdicos.

Loky hoy nos quiere asustar con de los gigantes del norte. Pero no lo consigue. Dice que el dios del que toma su nombre, Loky, tuvo dos hijos que fueron fieros gigantes. Después de contarnos la pinta que tenían, nos atrevemos a dibujarlos.

Nos enseña dos juegos con los que dice que ellos se entretenían: el tiro de cabras o “geitur skot” y el “nalukauq” o mantear al dios vikingo.

El tiro de cabras es un juego en el que participan dos niños o niñas subidos a las espaldas de dos adultos; ambos, bien agarrados a sus "monturas", sujetan con las manos una cuerda con fuerza.

Luego se traza una línea en el suelo y cada equipo se sitúa de un lado de la misma. Cada equipo tira del contrario. Pierde el que suelte antes la cuerda, o caiga de su montura o sea arrastrado al otro lado de la raya que delimita su campo. Nosotros lo hacemos peo sin monturas.

Loky nos cuenta, con una sonrisa, que el primer gigante se llamaba Ymir. Un día se quedó dormido y de cada una de sus axilas nació un hijo y una hija gigantes y de sus pies surgió un monstruo de seis cabezas. Mas que asustarnos, nos entra la risa al escuchar esta leyenda.

Los dioses vikingos siempre están peleando contra los indomables gigantes. Thor es el que más manía les tiene.

Suelen tener una pinta espantosa. Son enormes, con garras, colmillos y la cara deformada. En ocasiones, pueden incluso tener varias cabezas y formas inimaginables. Algunos son bastante tontos, mientras que otros, increíblemente viejos, son muy sabios.

El Árbol de la Vida

La verdad es que Lagertha tiene muchas historias que contar. Una de ellas le encanta a Sigur, el granjero, ya que le apasionan los arboles y los animales legendarios.


Es la leyenda de Yggdrasil es el árbol de la vida de la mitología vikinga. Sus raíces y ramas mantienen unidos los nueve mundos. Y está bastante poblado.

A los pies del árbol se encuentra el dios Heimdall, encargado de protegerlo de los ataques del dragón Nidhogg y de una multitud de gusanos que tratan de comerse sus raíces.

También se encargan de cuidarlo las tres Normas, extrañas hadas que lo riegan con las aguas y las arcillas de un pozo mágico. Se llaman Urd, "lo que ha ocurrido", Verdandi, "lo que ocurre ahora" y Skuld "lo que debería suceder". Tejen los tapices de los destinos de los mortales. La vida de cada persona es un hilo en su telar y la longitud de cada cuerda es la duración de la vida de dicha persona.

Este gran fresno rezuma miel. En lo más alto vive un águila sin nombre y entre sus ojos anida un halcón que se llama Vedrfölnir. Bajo la tierra encontramos al dragón Nidhogg que devora las raíces sin piedad.


También vive en el árbol una ardilla llamada Ratatösk que corre de arriba abajo por el árbol llevando mensajes entre el águila y el dragón, intentando enfadar a uno con el otro. Y cuatro ciervos, Dáinn, Dvalinn, Duneyrr y Durapror, que fueron enanos traviesos.

Sigur, después de limpiar y darle de comer a los animales de su corral, nos ayuda a plantar encinas en honor al gran Árbol Yggdrasil. Y dibujamos el personaje que mas nos ha flipado que habita este alucinante mundo.

En nuestro mundo sobran unos pocos de "ratatosks". ¿No os parece?

Patatas vikingas

El la cocina de Olaf, hemos preparado patatas vikingas.

En sus viajes por el mundo, nuestro cocinero se fijaba en los pucheros y en los ingredientes de otras cocinas para él exóticas. Tal vez, cuando llegaron a América, se enamoró de las patatas. Y al pasar por el mediterráneo, no olvido atesorar el aceite de oliva y el pimentón.

Estos son los ingredientes esenciales de las patatas asadas vikingas de Olaf. Nosotros como no tenemos horno de leña, empleamos el eficaz microondas.

La receta:

En un plato ponemos las patatas bien limpias y sin pelar, partidas por la mitad. Entre ambas mitades colocamos unas ramitas de romero y un poco de sal.


Las envolvemos con papel film para luego meterlas en el microondas unos 10 minutos a tope de potencia. Las sacamos con cuidado y, cuando enfríen un poco, les quitamos el plástico, las abrimos y le añadimos un poco de pimentón dulce y un chorrito de aceite de oliva. Los más atrevidos, puede poner pimentón picante. Esta es la modalidad "patata al dragón Nidhogg".

Mientras las patatas se asan, realizamos moldes con las patatas para estampar y coloreamos el dibujo de uno de estos sabrosos tubérculos con pimentón mezclado con alcohol.

La estampación la podemos realizar con acrílicos o utilizando tampones de tinta. Este segundo procedimiento es bastante más limpio y los contornos de las formas quedan mejor definidas. Aunque perdemos algo de color.

La segunda reunión ecovikinga en Kattevegat

A esta aldea vikinga en mitad de la Vega de Granada han llegado las tripulaciones de Noruega, Dinamarca y Suecia: Los Bla o la tripulación azul, Los Vit o la tripulación blanca y Los Gul o la tripulación amarilla.

Tras instalarse y conocer que es lo que van a hacer en la aldea de Kattevegat bajo el símbolo Valknut y saber quienes son los siete vikingos y vikingas más famosos del lugar, dimos un paseo por el entorno y conocimos la celebre sala de los siete escudos.

Y realizamos las pruebas de Lagertha: las manos negras, las adivinanzas, las cajas misteriosas y la vela de colores del navegante.

Además, realizamos el hidroalcohol de Freydis y la hidromiel de Olaf.

Y todo ello siguiendo un nuevo modo de hacer, con nuestras mascarillas, los cuatro lavados de manos y la distancia entre nosotros cuando es precisa. Nuestros saludos en la distancia: Skol para darnos la bienvenida  y Skal para despedirnos.

Por cierto, está con nosotros Paula, la famosa cocinera del canal de Youtube Ciempiés TV (pincha aquí)

Al final de la mañana, lavamos las mascarillas y tras enjuagarlas dejamos que el sol haga su tarea purificadora.

Mañana comenzamos a aprender a ser ecovikingos.

El Chamán Eutirox

Y contaros que, para sorpresa de todos, apareció en el último momento el chamán "Eutirox el Semidecapitado". 

Venido de misteriosas tierras, se presentó ante nosotros. Dicen que intentaron cortarle la cabeza dos veces sin éxito y que de su cuello salió volando una mariposa.

Portaba el cetro mágico, huesos de dragón y las tres llaves de la adivinación. Se las regalaron las Normas, espíritus femeninos protectores del árbol de la vida:  Urd dueña de lo que ha ocurrido, Verdandi dueña de lo que ocurre ahora y Skuld dueña de lo que debería suceder.

En un zurrón llevaba las runas.

En el salón de los escudos se manifestó ante las tres tripulaciones, echando las runas a los vikingos y vikingas deseosos de obtener respuestas a sus incertidumbres. ¿Me casaré? ¿Voy a tener muchos novios? ¿Veré hoy a mis primos? ¿Voy a tener una vida llena de éxitos? ¿Seré un gran karateka? ¿Trabajaré en algo emocionante? 

Y Atreyu, haciendo honor a su nombre, un tanto atemorizado pregunto ¿Dónde está el mundo de la fantasía?

Eutirox  echó un trago de hidromiel, nos dio su bendición y desapareció por los caminos de Kattevegat.