Se basa en la improvisación y la libre interpretación. Los músicos ejecutan un tema conocido y dejan volar su imaginación para adornarlo y modificarlo según dicta la inspiración. Nos enseña a centrarnos en aquello que nos está sucediendo ahora mismo sin agobiarnos por lo que traiga el futuro, una lección valiosa que ayuda a cualquier persona a acercarse a la felicidad.
Y por ello, en la mañana de cine, pusimos "Los Aristogatos", una entrañable película de animación dibujada al modo tradicional del año 1970. Todos quieren ser un gato jazz.
Antes de entrar en el cine y disfrutar de las palomitas, le cantamos el cumpleaños feliz a Victor que cumple mañana 5 añitos. Felicidades y gracias por los bizcochos.
Tras la película hicimos un pop-up de un piano en honor del jazz y de esta pandilla de gatos marchosos.
Luego tiempo de refrescarse. El segundo manguerazo del turno. Las pompas, la pista deslizante por la que propulsamos a grandes y pequeños, los cubos de agua y un chapuzón rápido en la piscina del vecino.
Y como no, el cañón de espuma. Es divertido verlos salir disfrazados de fantoches espumosos.
Terminamos la mañana comiendonos el teclado de un piano Y polos de naranja y mandarina que estaban deliciosos.
Y nos despedimos de un grupito de amigos y amigas que ya no vendrán el lunes. ¡Buen verano a todos!
Buen fin de semana y el lunes ponemos punto y final a este tercer acto de la opera "Dando la nota en clave de Sol".
Y hablando de este asunto, hoy hablamos un poco de Verdi (de la Banda de Morart habíamos citado a todos menos a Giuseppe). Fue un compositor romántico italiano de ópera del siglo XIX, autor de algunos de los títulos más populares del repertorio lírico, como Rigoletto, La Traviata o Il Trovatore.
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