Todas las mañanas iniciamos el día en la asamblea que se abre con la historia de una mujer extraordinaria. Hoy el sueño de Ann Makosinski. Tiene apenas 20 años, sin embargo, pese a su corta edad, ya ha realizado dos inventos: una linterna que convierte el calor del cuerpo en electricidad y una taza que aprovecha el exceso de temperatura del café para cargar teléfonos y dispositivos de música.
Luego vemos las libretas viajeras: mujeres alucinantes, los superpoderes de las abuelas, los miedos y las música en femenino singular. Y seguimos llenando el botiquín de los afectos de nuevos artefactos: abanicos para ventilar los enfados, esparadrapo para que no se escapen nuestros sueños o para tapar las mentiras, gasas para limpiar la mala uva, pastillas para sonreír...
Dedicamos un ratito a terminar nuestras gafas violeta, símbolo de que debemos cambiar el modo de ver el mundo que nos rodea.
Estos días, antes y después de la merienda, cada grupo hace una actividad diferente: atrevete con la naturaleza, con el deporte y con la cocina y atrevete a darle al coco, a respetar y a crear. Hoy nos fijamos en dos de ellas.
Atrévete con la naturaleza es un momento para contactar con los animales del corral, mancharnos las manos con la tierra de la huerta y elaborar una manualidad propia de naturalistas curiosos. En la huerta recogimos calabacines, patatas y pusimos laurel a secar.
Revolver la tierra y que aparezca una tierna patata es... ¡impresionante!
Nos acercamos a los amigos del corral: patos, gallinas, conejos, Casiopea el galápago, Gustavo y Mora los cerdos vietnamitas, Pocholo el verderón, Jara la cabra y Catalina la oveja.
Y con arroz y unas pastas, recordamos lo que es la metamorfosis. Y es que fue María Sibylla la naturalista, pintora y aventurera que observó los insectos y desentrañó el fascinante proceso de la metamorfosis.
Tras la merienda nos atrevemos a darle al coco. Un poco de ciencia, en esta ocasión la química de los ácidos y las bases. El extintor casero, la bolsa que se hincha y el huevo que bota. En definitiva: "¡Oh el CO2¡"
Y realizamos la manualidad de un rompecabezas africano, un juego de cuerda con el que los niños y niñas de guinea le dan al coco.
Siempre terminamos viendo y pensando. En esta ocasión nos acercamos a la gallega Isabel Zendal, considerada la primera enfermera española. Cuidó a 22 niños en un viaje por el océano Atlántico para llevar a América una vacuna contra la viruela. Los cuerpecillos de esos pequeños eran los portadores de dicha vacuna. Nos valemos de la serie Lunnis de Leyenda.
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