viernes, 1 de julio de 2022

Termina el Capítulo 1 de Alicia en la Vega de las Maravillas.

Hoy ha sido el día más loco de estas cinco jornadas majaretas. 

Nada más llegar, apareció de nuevo el Sombrerero Loco. Y nos entregó unos certificados un tanto peculiares. Y entre otras chaladuras, nos retó a mover sin sentido las figuras del ajedrez, a divertirnos con este noble juego sin tener ni idea de cómo son sus normas. 

Antes de irse, hicimos el baile del sombrerero indicado para los días más Gloriciosos, una danza que precisa que las piernas taladrén y se entrelacen viscoleantes. 

Y comenzamos a jugar con las piezas del ajedrez, en honor a muchos personajes de "A través del espejo y lo que Alicia encontró allí". Realizamos una ronda de juego que pasa por tres casillas.

En la primera realizamos carreras de relevos en las que llevamos de un lado para otro los peones blancos y negros. Y manteamos a piezas blancas y negras intentando que las de nuestro color permanezcan en la manta mientras las demás salen propulsadas. 

En la segunda casilla atinamos nuestra puntería intentando derribar los peones blancos o negros e improvisamos una bolera donde los que salen más parados no son bolos sino torres, alfiles, caballos, reyes y reinas. 

Y en la tercera los reyes atraviesan peligrosos puentes y jugamos a adivinar cual es la pieza escondida bajo las telas. 

Tras esta rigurosa clase de ajedrez, nos juntamos en las asambleas para realizar nuestro certificado de estar más locos que el sombrerero, de sonreír como el gato de Cheshire y de aprovechar cada segundo del reloj del Conejo Blanco. 

Coloreamos el gato, que nuestra sonrisa tiene más colores que el arco iris, dibujamos la cara del sombrerero y ponemos nuestra huella dactilar y un par de ojitos en la esfera del reloj del conejo bullas. 

Y llega el momento de la merienda loca compartida. Mil gracias por los maravillosos bizcochos y otras viandas que nos habéis regalado. Podríamos haber estado jornadas y jornadas dando vueltas alrededor de tan bien surtida mesa. 

Y sin tiempo casi para respirar, el agua y la espuma del mar de lágrimas. 

Nos mojamos lanzandonos vasos de agua de los barreños y luego.... el cañon de espuma. Algunos tienen tantos tiros dados en sumergirse en jabón que han venido preparados con sus gafas de bucear. 

Creo que lo hemos conseguido. Por un lado despertar cierta curiosidad por el mundo de Alicia y por otro fomentar la locura en vuestros hijos e hijas. Pero... qué veo. Vosotros y vosotras también estáis como chotas. Más gente así y el mundo sería más sostenible, justo y solidario. 

Y como una cosa lleva a la otra, deseamos un feliz viaje a nuestro amigo Moha que regresa a Marruecos a ver a su familia durante un par de semanas después de muchos años. Un viaje de ida y vuelta, algo que parece tan sencillo y, sin embargo es tan complicado. 

4 comentarios:

  1. ¡Qué semana más alocadamente maravillosa! Muchas gracias por hacer de cada día una sorpresa y una ilusión 😊

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  2. Muchas gracias por esta primera semana llena de ilusión y diversión para los peques!!🥰

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  3. Qué maravilla!!!! Gracias por hacer felices a nuestros niños y niñas!!!

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  4. Enhorabuena a todo el equipo de Ciempiés por toda esta semana tan diferente y divertida que les habéis ofrecido a nuestros pequeños!!

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